Comió hongo silvestre en Calamuchita y falleció
Un hombre de 36 años de edad que estaba internado por haber ingerido hongos silvestres venenosos que recolectó en las sierras de Córdoba falleció ayer al mediodía en el Sanatorio Allende de la capital provincial.
Iván Tarasconi, oriundo de Río Cuarto, ingirió la especie Amanita Phalloides, hongo que le «produjo una insuficiencia hepática fulminante», había precisado el doctor Mario Sorbera del Sanatorio Allende.
La víctima se encontraba internada con un panorama muy complicado desde el pasado viernes, aunque el consumo de hongos fue dos días antes. Sorbera alertó sobre la gravedad del consumo de Amanita Phalloides, que provoca una mortalidad «del 95 por ciento de los casos, de acuerdo a lo que dice la biografía, es uno de los hongos más venenosos que existen».
Si bien genera un daño generalizado en el cuerpo, las toxinas de este hongo atacan de manera particular al hígado y eso causa la muerte, explicó a Canal 12 Carlos Urcelay, biólogo profesor de la UNC e investigador del Conicet especializado en hongos.
Urcelay aclaró además que el Amanita Phalloides es un hongo que solamente crece junto a los pinos y robles, ya que sus raíces se asocian, por eso, es común hallarlo en varios sectores de las sierras de Córdoba.
Por ello, buscan que lo ocurrido se difunda para alertar a otras personas a no realizar estas acciones, que son de sumo peligro, sin la supervisión de un experto que identifique cuáles hongos son comestibles y cuáles no.
El biólogo añadió que «el daño en el cuerpo depende de la cantidad de hongo consumida, pero que generalmente suelen ser consecuencias leves».
En este caso, al parecer el hombre consumió una cantidad considerable.
«Este tipo de hongos no miden más de 14 centímetros de alto, no son alucinógenos y crecen junto a los pinos y robles», dijo a Télam Leopoldo Javier Iannone, biólogo e investigador del Conicet. Iannone mencionó que «puede pasar que la gente junte champiñones, y sin darse cuenta recoja algún hongo Amanita», por lo que recomendó a las personas comprar este tipo de alimentos y no recolectar hongos silvestres en las sierras.