Crisis del transporte.

circulan 1.000 taxis menos de los que deberían, un 25 por ciento menos de los 4.000 que componen la flota. El dato fue revelado por la Cámara de Titulares de Licencias de Taxis y Remises (Catiltar), que hoy concurrirá al Concejo para discutir un aumento de tarifa, y explica por qué es tan difícil conseguir un coche en algunos momentos del día, sobre todo de noche, y en algunas zonas de la ciudad, en especial los barrios.
Es baja la rentabilidad del negocio a raíz del desfasaje entre los costos y el valor de la bajada de bandera y la ficha, lo que está degradando el sistema. Así, muchos autos que se rompen no salen más y también es común que tengan un solo chofer, porque no pueden pagar el sueldo de un peón, y no cumplan así las 16 horas en calle que debe respetar una parte de la flota por ordenanza.
1.000 que no están circulando, 200 se deben a que las chapas fueron caucionadas y otras 200 caducaron. En tanto, se transfieren entre 25 y 30 licencias mensuales, que están demoradas porque el trámite lleva un tiempo administrativo hasta que lo firma la Secretaría de Movilidad y el coche puede salir a trabajar.
Un posible parche a la problemática de la falta de taxis son las 500 nuevas chapas que licita el municipio. Si bien en un primer momento hubo 1.500 interesados, luego muy pocos pudieron avanzar, por lo que la Municipalidad prorrogó el cierre de la inscripción en un par de oportunidades, previsto ahora para el 8 de abril.
Según informaron desde el sector, esto se debe a que una unidad nueva cuesta 2,5 millones de pesos, y las licencias cotizan en 600 mil pesos. Por eso, el Ejecutivo evalúa flexibilizar algunas de las condiciones de acceso, y el pedido de créditos blandos del Banco Municipal para los que hoy son choferes, en especial las mujeres.