Novaretti, Bottinelli y Laso.
La derrota contra Colón sin dudas que fue un golpe, no de la magnitud que provoca un traspié por los puntos, pero cuanto menos un llamado de atención. Porque esa goleada no resiste otro modo de análisis que el obligado bajo la autocrítica de los errores defensivos que se cometieron. Ese análisis es simple, lineal, sencillo y contundente: tres de los cuatro goles que convirtió el sabalero llegaron por groseros yerros propios. En dos de ellos fue partícipe directo Joaquín Laso, a quien el técnico quiso probar junto a Jonathan Bottinelli. Pero minutos después, en el segundo encuentro, Diego Novaretti también tuvo lo suyo, cometiendo algunos errores propios de un principiante. Por eso, a esta altura está claro que de mitad de cancha hacia arriba los nombres están más o menos claro, ahora en la defensa la cosa pinta un poco más confusa. Hay tres nombres (siempre que se reglamente la amnistía de los jugadores que deben cumplir alguna fecha de suspensión, entre los que figura Laso) para dos lugares y en los tres amistosos no hubo garantías extremas de parte de ellos. Y todas las combinaciones posibles fueron puestas en práctica: Novaretti-Bottinelli, Novaretti-Laso y Laso-Bottinelli. El cuarto en discordia es Facundo Almada, pero el juvenil deberá transitar un período de aislamiento, lo que le quitaría chances.