Un antes y un después en la historia de los Oscar

Cuando la ceremonia de los Oscar parecía hundirse en el sopor, «Parasite» dio el gran batacazo. La exitosa película surcoreana se convirtió en el primer filme en lengua no inglesa en ganar el máximo galardón de la Academia de Cine de Hollywood desde su creación. El contundente triunfo de «Parasite» en la 92ª edición de los Oscar (se impuso en las categorías de mejor película, dirección, guión original y película internacional) marcará un antes y un después en la historia de esta ceremonia y también en el proceso imparable de penetración internacional en Hollywood.

Ya nadie duda que el largometraje de Bong Joon Ho, que dispara una salvaje crítica a las desigualdades sociales que provoca el capitalismo, se ha convertido en la «película del año». Y pocas veces ese título está tan justificado en términos de calidad, impacto en la conversación mundial sobre cine y, finalmente, reconocimiento de la industria.

Sólo once títulos en la historia han sido nominados como mejor película sin estar hablados en inglés. Y sólo seis han estado nominados a la vez como mejor película extranjera. Ninguno había logrado el premio principal. «Parasite» dio ese paso final que le faltó el año pasado a «Roma», de Alfonso Cuarón, cuando el público se quedó con la sensación de que la mejor película del año no había sido premiada.

«Parasite» se impuso, además, en un año en el que Quentin Tarantino presentaba «Había una vez en Hollywood», una de sus mejores películas y una carta de amor a esta ciudad; Martin Scorsese, «El irlandés», una obra que resume todo lo que espera el público de Scorsese; Todd Philips, «Joker», un nuevo ángulo del cine basado en personajes de cómic muy impactante; y Sam Mendes, «1917», un drama bélico de mucho impacto visual que se había llevado todos los premios hasta ahora.

Cuando Bong subió a recibir el Oscar a mejor director, le agradeció a Martin Scorsese por su trayectoria, instante en el que todos los presentes se pararon y aplaudieron de pie al icónico director de «Taxi Driver», «Pandillas de Nueva York» y «Toro Salvaje». El realizador coreano también le dio su reconocimiento a Tarantino por ayudarlo con sus películas en Estados Unidos y sentenció: «Me gustaría partir esta estatuilla en cinco pedazos y compartirla con los otros nominados».

«Cuidado con eso»

Hace cinco años, la Academia de Cine de Hollywood se propuso hacer su cuerpo de votantes más internacional. Desde entonces han entrado alrededor de 1.500 nuevos miembros que no son norteamericanos. «Cuidado con eso», había dicho Antonio Banderas a la prensa el sábado. «Las votaciones empiezan a abrirse de una manera increíble», agregó.

Banderas destacaba la cantidad de películas internacionales que se habían colado en las nominaciones. «Se están expandiendo porque quieren convertir los Oscar en unos premios mundiales. Eso está pasando a mayor velocidad de lo que la gente cree», afirmó. Sólo 24 horas después se materializaba la advertencia de Banderas sobre el escenario de los Oscar. Para explicar este fenómeno, el propio Bong aseguró en la rueda de prensa posterior a la gala que «el streaming y las redes han acostumbrado al público a ver contenido en otros idiomas».

Los premios a «Parasite» también llevan consigo un reconocimiento al crecimiento exponencial que viene experimentando la industria cinematográfica de Corea del Sur en las últimas décadas, con películas que logran saltar las fronteras de un vigoroso mercado interno y que consiguen aunar el gusto popular y el conocimiento de los géneros con una reflexión cinematográfica profunda. Es más, esta es una gran oportunidad para descubrir la filmografía completa de Bong, que incluye otras joyas como «Memorias de un asesino», «Mother» y «The Host».

La felicitación del presidente

El presidente surcoreano, Moon Jae-in, felicitó ayer a todo el equipo de «Parasite» por crear «una historia coreana única». En su cuenta oficial de Twitter, el jefe de Estado escribió: «Me uno a todos los coreanos para felicitar a la película «Parasite»». Además dijo sentirse «orgulloso del director Bong Joon Ho, los actores y el equipo» por ganar cuatro galardones. Los cuatro Oscar y la Palma de Oro de Cannes, que recibió el año pasado, «pueden atribuirse a los esfuerzos acumulados de cada cineasta coreano en los últimos 100 años», expresó también Moon, en referencia al centenario que acaba de celebrar el cine coreano.

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