Trump repuso aranceles a acero y aluminio argentinos
Estados Unidos impuso ayer aranceles a las importaciones de acero y aluminio que proceden de la Argentina y Brasil en respuesta a las recientes devaluaciones de las monedas de esos países sudamericanos, según anunció el presidente estadounidense, Donald Trump, en un mensaje por Twitter.
La medida, que causó sorpresa en ambos países, podría afectar fuertemente la operatoria y las cotizaciones de las acciones de las empresas del sector como Aluar, Ternium y Tenaris.
El ministro de Producción y Trabajo, Dante Sica, se mostró sorprendido por la decisión. “Fue un tema inesperado, no existía ninguna señal ni hacia nuestro gobierno, ni hacia el de Brasil, ni al sector privado, respecto a cambios en el acuerdo con Estados Unidos”, señaló. Aunque desde el sector empresario cargaron las tintas hacia el gobierno nacional criticando la “inacción” para sostener en el tiempo el logro de la eliminación de aranceles en 2018.
Trump dijo que Argentina y Brasil “han estado llevando adelante una devaluación masiva de sus monedas, lo cual no es bueno para nuestros agricultores”. Con vigencia inmediata, señaló que restablecerá los aranceles sobre “todo el acero y aluminio que se envíe a los EEUU desde esos países”.
Para el presidente y principal accionista de Aluar, Javier Madanes Quintanilla, “la línea argumental de Trump no es muy creíble, ya que plantea un perjuicio a los productores rurales de su país cuando las razones son de orden geopolítico”.
El empresario, quien criticó la “inacción del gobierno argentino” desde 2018, no descartó que la decisión obedeciera mucho más una represalia contra Brasil por sus acuerdos con China en el marco del grupo Brics y contra Argentina por la posible cercanía del futuro gobierno con Venezuela. “En una época, los Estados Unidos supieron actuar de manera más directa con intervenciones militares y ahora lo hacen con sanciones comerciales. Esta es la manera de manejar las cosas por parte de Trump”, dijo.
La versión se ajusta también a las declaraciones que realizó el secretario de Comercio de Estados Unidos, Wilbur Ross, quien dio a entender que el anuncio es una señal hacia China, en medio de la guerra comercial.
El funcionario estadounidense dijo que la decisión le demuestra a China que Washington no dudará en imponer sanciones a cualquier país que devalúe demasiado su moneda. “Aun nuestros amigos y mejores aliados deben vivir según las reglas que existen. Creo que el presidente (Trump) está preocupado por el deterioro de la moneda de Brasil. Es un factor real para tener en cuenta: cuando más devalúen su moneda, más baratos serán sus productos y algo hay que hacer”, dijo Ross.
En EEUU están convencidos de que tanto Argentina como Brasil se beneficiaron de la guerra comercial con China, aprovechado los aranceles de Beijing a los productos agrícolas estadounidenses para exportar más al país asiático.
Por eso Trump también volvió a interpelar a la Reserva Federal (FED) para que baje las tasas. “Debería actuar para que los países no se sigan aprovechando de nuestro fuerte dólar al devaluar más sus monedas”, dijo y esto”complica que nuestros fabricantes y agricultores exporten sus productos de una manera justa”.
En mayo de 2018, cuando Estados Unidos había decidido una medida similar, el gobierno argentino logró un acuerdo con ese país para que se exceptuara a la Argentina del pago de aranceles, junto a Australia, Brasil y Corea del Sur. Impactó sobre una cantidad equivalente al 100 por ciento del promedio del aluminio y al 135 por ciento del promedio del acero exportado en los últimos tres años hacia ese país ingresarán sin aranceles”.
Ayer el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro anunció que de ser necesario hablará telefónicamente con Donald Trump, con quien dijo tener “canal abierto” frente al anuncio del mandatario.
Por su parte, desde Aluar le reclamaron al futuro gobierno “actuar en las relaciones internacionales y adoptar medidas de defensa”.
La Cámara Argentina del Acero advirtió sobre el impacto de la medida en el empleo industrial. Frente a eso, solicitó al Estado que “arbitre los medios necesarios para revertirla en forma inmediata”, y solicitó que el tema sea abordado junto a Brasil en la próxima Cumbre de Presidentes del Mercosur.
