Ricardone desinfecta los vehículos
La ruta nacional A012 es conocida en la región y a nivel nacional como una de las carreteras con más circulación de camiones hacia las terminales del cordón industrial y portuario. Por eso, y amén de los controles que realizan autoridades de distintos niveles en la zona, la comuna de Ricardone puso manos a la obra y comenzó a desinfectar a todo vehículo que recorra esa vía en su jurisdicción.
Ricardone, localidad del departamento San Lorenzo ubicada a sólo 26 kilómetros de Rosario, ha venido creciendo sostenidamente de la mano de nuevas urbanizaciones y del corrimiento poblacional, pero hasta ayer no tenía ningún caso, ni confirmado ni sospechoso, de coronavirus.
No obstante, sus autoridades decidieron tomar alguna medida y, sin llegar a casos extremos que se dieron en otras localidades que cerraron o restringieron el tránsito en rutas nacionales o provinciales, comenzó a brindar un servicio: a cada vehículo que pasa le hacen detener la marcha y lo rocían con un poderoso desinfectante.
En diálogo con La Capital, el presidente comunal de Ricardone, Juan Carlos Doria, explicó que se trata de una medida preventiva. «Lo hacemos cumpliendo con las directivas de transitabilidad impuestas por el gobierno nacional. Por la A012 circulan, sólo en nuestra juridisdicción, más de mil camiones diarios que llegan a las plantas de acopio. Quisimos hacer algo para contribuir a la seguridad sanitaria, desde nuestro lugar. Este es nuestro gesto» , afirmó el mandatario local.
Concretamente, lo que se rocía en neumáticos y chasis de los vehículos es cloruro de benzalconio, un desinfectante, tensoactivo, bactericida e inhibidor de la actividad viral.
«Empezamos con estas medidas desde hace una semana. Creo que es un gesto más, además que aporta a la conciencia colectiva que está mostrando nuestra comunidad», dijo Doria, y advirtió que en Ricardone se están tomando medidas restrictivas en cuanto a la circulación y a la apertura y cierre de comercios. «Los mercados abren a las 7 de la mañana y a las 19 ya no hay más ningún negocio abierto».
El funcionario aseguró que hay «una incertidumbre muy grande. Tengo más de 6 mil habitantes en la localidad, muchos de ellos niños, y veo que hay un gran estrés que se traslada a los chicos. Pero aquí tenemos a la Guardia Urbana, personal de tránsito y policía controlando. No es para menos. Estamos sobre la A012, una ruta por donde circulan camiones y vehículos que vienen de todas partes del país».