«Pensar que la grieta son personas es ingenuo», señaló Macri en una entrevista radial.
El expresidente Mauricio Macri consideró este jueves que «pensar que la grieta son personas es ingenuo» porque lo que divide a la sociedad son los «valores», consideró que el Gobierno nacional debería «empezar de nuevo» y se manifestó contra el aporte extraordinario a las grandes fortunas al sostener que «si se castiga al capital con impuestos absurdos, las inversiones se van».
En una entrevista con FM 104.7 de Resistencia, Chaco, Macri fue consultado sobre qué opinaba de los dichos del expresidente de la Cámara de Diputados durante su gestión, Emilio Monzó, quien había pedido «jubilarlo» junto a la vicepresidenta Cristina Kirchner.
«Pensar que la grieta son personas es ingenuo. La grieta son los valores que estamos discutiendo. ¿Cómo se puede acordar sobre la base de que hay que soltar delincuentes y violadores? ¿Cómo se negocian las tomas?», se preguntó Macri.
Esta semana, ya se había mostrado arrepentido de dejar en manos de Monzó y el ala «filoperonista» de su gobierno las negociaciones políticas de la gestión.
«Un Presidente no puede delegar eso, igualmente no sé si yo hubiese tenido resultados distintos, porque a la luz de los que estamos viviendo queda claro que el kirchnerismo nunca dejó de dominar al peronismo», sostuvo hoy en esa línea.
Macri reconoció primero que «hace mucho» que no habla con Monzó y no cargó las tintas sobre su tarea, pero tampoco se retractó de que lo dijo sobre el extitular de la Cámara de Diputados .
Fuentes del macrismo explicaron que la entrevista realizada con el medio chaqueño será la primera de una serie de diálogos con radios del interior, y señalaron que el expresidente, que esta semana dio su primer reportaje a un medio argentino desde que dejó el poder, dialogará con La Nación+ y con el canal América en los próximos días.
De esta forma, y según indicaron sus voceros, Macri procura ocupar un lugar central en la toma de decisiones de Juntos por el Cambio, de cara a las elecciones de 2021, en las cuales no tendría intenciones de postularse, al menos por ahora.
«Acá lo que hay que entender es que la posición extrema no está en Juntos por el Cambio o en mi gobierno, sino en esta versión radicalizada que ha tomado el peronismo desde que está gobernado por el kirchnerismo. Eso nos ha aislado de nuevo del mundo», añadió.
«Soy muy optimista sobre el futuro más allá del pesimismo a corto plazo», dijo en otro momento de la entrevista y aseguró que «lo que viene es un cambio histórico en la vida de los argentinos».
«Que tengamos una alternativa de poder nos genera el optimismo de pensar que estamos ante el último gobierno populista de nuestra historia. A partir de acá podemos tener 20 años de progreso consecutivos, acordando políticas de estado razonables», indicó en tono electoral.
«Tenemos un país maravilloso, pero eso no nos redime de tener que trabajar, decirle que no a la cultura del pobrismo y sí a la cultura del mérito, el progreso y la superación».
El expresidente criticó la política exterior actual y también el aporte extraordinario a las grandes fortunas. Para el fundador de PRO hoy el mundo se ha globalizado hasta ser una ciudad con muchos barrios. «Si vos castigas al capital con impuestos absurdos, el capital se va, invierte en otro barrio», aseguró.
También le pidió al Gobierno «asumir lo que ha pasado y empezar de vuelta, que retomen el rumbo en el que iba Juntos por el Cambio y hagan las cosas mejor que nosotros», planteó.
En otro tramo de la entrevista, le respondió a la líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, quien afirmó que «Cristina Fernández de Kirchner no fue presa porque el gobierno de Cambiemos no quería que se haga justicia».
«Cada día que fui presidente trabajé para mejorar la calidad institucional del país. Encomendé a la Justicia que actúe con independencia y muchos se quejaron, decían que la Justicia no tenía una conducción. Jamás me ocupé de una causa de Cristina Kirchner. Y ella, desde que estoy en el llano, lo único que ha hecho es perseguirme», remarcó.
Al principio de la entrevista, cuestionado sobre su viaje de más de un mes a Europa, volvió a criticar el aislamiento social, preventivo y obligatorio dispuesto para combatir el coronavirus, al asegurar que tiene «una posición crítica acerca de la cuarentena eterna y el mundo me ha dado la razón».